LA FOTO DE FELIPE VI Y LA INFANTA CRISTINA DEJA A LA REINA LETIZIA "SOLA Y APARTADA": "ESTO NO HAY QUIEN LO ARREGLE"

Fue la imagen del fin de semana. La de Felipe VI llegando a la boda de su ahijada Victoria López-Quesada con Enrique Moreno, celebrada en la Finca Soto Mozanaque, a las afueras de Madrid. El monarca llegó acompañado por su hermana mediana, la infanta Cristina, sentada en el asiento del copiloto de su coche. Y se dejaron fotografiar. La reina Letizia, mientras tanto, estaba en París apoyando a los deportistas españoles durante los Juegos Paralímpicos.

Esta imagen ha sido interpretada como la fotografía de la reconciliación entre los hermanos y, para muchos, también refleja un posible distanciamiento de la familia con la propia doña Letizia, a quien no habría sentado nada bien este gesto: "La reconciliación lleva tiempo en marcha. Dudo que a la reina Letizia le haya sentado bien. Es sintomático que ella esté en París en estos momentos", dijo la periodista experta en Casas Reales Ana Polo este martes en Espejo Público.

La reflexión de Pilar Eyre

Pilar Eyre, la famosa cronista real, también ha hablado de la ya histórica fotografía del rey con su hermana, a la que se sumó la del posado con los novios que fue difundida por la Casa Real y en la que también estaba la reina Sofía y la infanta Elena: "Todo estaba perfectamente orquestado".

Sobre la llegada de Felipe con su hermana, Eyre escribe en Lecturas: "No iban en el asiento de atrás de un coche con los cristales tintados, sino de forma que se les pudiese ver con más claridad y contundencia, el equivalente moderno de ir en carroza descubierta. Incluso se detuvieron unos segundos para que pudieran tomar la foto. Felipe al volante del Lexus y su hermana sentada orgullosamente a su lado, en el lugar que hubiera tenido que ocupar Letizia, en caso de haber ido".

Atrás quedaron los tiempos convulsos en los que Cristina era "ninguneada", como el funeral de la infanta Pilar en 2020, donde los reyes Felipe y Letizia, según Eyre, pasaron "ostentosamente delante de Cristina sin dirigirle ni una sola mirada". Y más reciente en el tiempo: "Hace tres meses, en la entrega de becas de La Caixa, un acto del que también se ausentó Letizia, el Rey y su hermana estuvieron en el mismo auditorio, aunque en filas distintas y sin intercambiar palabra", recuerda la periodista.

Y Letizia, en París

Doña Letizia, mientras se celebraba la boda, continuaba en París representando a la Corona en los Juegos Paralímpicos. Así lo interpreta Eyre: "Totalmente sola. Desgajada del núcleo familiar. Apartada. ¿La reina tenía la obligación de estar en París? Es una iniciativa admirable, pero los Juegos Paralímpicos duran hasta el 8 de septiembre y este fin de semana no era ni la inauguración ni la clausura". En este sentido, la periodista se pregunta: "¿Qué sentido tenía que acudiera justamente estos días sino era mantenerla alejada de la boda y que su marido pudiera hacer su entrada triunfal no con ella, sino con su hermana?".

No obstante, sentencia: "Aunque quizás ha sido ella misma la que se ha apartado voluntariamente para no participar en esta puesta en escena que tanto ha tratado de evitar. La grieta que la separa de su cuñada es insalvable, los desencuentros públicos y privados han sido numerosos y eso no hay quien lo arregle".

2024-09-04T07:55:32Z dg43tfdfdgfd